¡No uses mi marca en público!
En el post pasado les habíamos hablado del product placement una técnica de marketing que se basa principalmente en empresas y marcas que pagan para que sus productos aparezcan en un espacio determinado, normalmente en televisión y cine.
En esta ocasión les hablaremos del product placement a la inversa, una tendencia poco ortodoxa, pues como su nombre lo infiere se trata de hacer completamente lo contrario. Es decir, marcas que pagan para no ser asociadas a un público no deseado para la empresa. Buscan acuerdos con determinados personajes influyentes para que éstos no utilicen sus productos en público y evitar así un posicionamiento no deseado. En pocas palabras, pagar para no figurar.
A pesar de que pudiera ser una medida controversial esta técnica tiene sus beneficios, como cuidar la imagen que una empresa quiere proyectar, ya que la aleja de posibles exposiciones dañinas o que no coincidan con su ideología, así como proteger a sus clientes o consumidores de ser asociados con una filosofía o grupo social poco grato.
A continuación presentamos algunos de los casos más sonados y polémicos de Product Placement a la Inversa:
Caso Abercrombie
Uno de los casos más conocidos es el de Abercrombie & Fitch y el actor Michael Sorrentino (The Situation) de la serie Jersey Shore. Directivos de la multinacional publicaron un comunicado anunciando que habían llegado a un acuerdo para que éste dejase de utilizar la ropa y los complementos de A&F delante de cámara.
A continuación anexamos un fragmento del comunicado:
“La asociación que se está haciendo de el Sr. Sorrentino con nuestra marca podría dañar profundamente a A&F. Entendemos que el show está hecho con fines lúdicos pero esta asociación es totalmente contraria a la aspiración de nuestra marca y puede angustiar a nuestros fans. Por ello, hemos ofrecido una sustanciosa cantidad a Michael ‘The Situation’ Sorrentino y los productores de MTV’s Jersey Shore para que usen otra marca.”
Si bien en esta situación la medida fue exitosamente aceptada, no siempre sucede así. El segundo caso sucedido en Latinoamérica, ejemplifica que, para algunos puede llegar a ser incluso ofensivo.
Caso Lacoste
El grupo argentino y sensación en Youtube “Los Wachiturros” famosos por interpretar “Tírate un paso,” denunciaron que la firma francesa Lacoste ofreció pagarles para que dejaran de usar sus prendas de vestir, ya que las consideran de alta calidad y van dirigidas a otro público.
“No me parece bien porque se cansaron de vender remeritas gracias a nosotros”, comentó uno de los líderes de la agrupación y señaló que ellos pusieron de moda la marca de vestir entre el público adolescente.
Estos casos nos llevan a la siguientes reflexiones, si el logotipo o imagen de tu marca fuera utilizada por personas que podrían potencialmente afectar su reputación ¿qué harías? y ¿consideras válido que se restrinja a determinadas personas acerca de lo que deben o no usar?
Una de las principales preguntas que tanto consumidores como el público se hacen cuando este tipo de casos se hacen públicos, es si realmente beneficia a las marcas o no. Sus detractores afirman que las compañías utilizan ésta técnica para conseguir publicidad gratuita.
Habiendo analizado las aristas de esta polémica técnica, sólo nos queda preguntar: ¿Consideras que esta práctica es discriminatoria o es válida para mantener la reputación de una marca?